Jugar con el hierro es lo que llevamos haciendo desde que nos conocimos Ari y Mireia, hará cerca de 15 años.
Nuestra trayectoria profesional tiene como base una sólida amistad que creemos lo explica todo y que hace que nuestro día a día en el taller sea casi idílico.
El proyecto, que hemos conseguido hacer crecer entre todas (nosotras dos y vosotras), nació, esencialmente, desde el amor a crear. Y es precisamente esta pasión por la creatividad, la que nos ha motivado siempre a construir y llevar adelante la idea que atesoramos desde el inicio.
Transformar artesanalmente el hierro. Jugar con esta materia prima, convirtiéndola en letras, nombres, frases. Forjarla para decorar vuestras paredes, para dar la bienvenida a los bebés de vuestros amigos, para sorprender a quien más quieres.
Y esta filosofía, la del entusiasmo por el propio disfrute del trabajar, nos ha movido a pensar en el juego en sí y a diseñar uno que os invite a entreteneros un rato y os acerque, un poco más, a nosotras.
¿Jugamos?
¡En este texto están las palabras en negrita que tenéis que encontrar en la Sopa de Letras!
Desde nuestro taller rural diseñamos, producimos y jugamos con el hierro.
Creemos que todo lo que está hecho a mano deja huella en este mundo.
Somos dos mujeres herreras creando artesanía de proximidad.
Mire y Ari
La ilustración de Las 7 Diferencias la realizó nuestra amiga Chantal Vizcaino las Navidades pasadas, cuando preparamos los Vales regalo y os lo explicamos en su día aquí.
Va, os dejamos las soluciones, por si desesperáis 😉